
Doce días. Doce regalos. Doce advertencias envueltas en sangre y nieve.
Me dejaron medio desnuda en una carretera helada,
con una bala de oro alrededor del cuello,
grabada con la noche en que no pude salvar la vida de un hombre.
Y el hombre que lo mató... me llevó a casa.
Dane Barrett.
Exasesino de la mafia. Marcado. Silencioso. Letal.
Dice que soy un cebo. Yo digo que es un monstruo.
Pero cada vez que me toca, olvido cuál de los dos es más peligroso.
Me mantiene encerrada en una cabaña de secretos,
observando el bosque como si susurrara mi nombre.
Pero cuando llega el primer regalo,
un eco manchado de sangre de sus pecados pasados,
me doy cuenta de que ambos estamos siendo perseguidos.
Jura que me protegerá.
Juro que nunca me romperé.
Pero en sus brazos, la venganza se convierte en fuego,
y la línea entre el odio y el hambre se desvanece.
0 Comentarios