1º LEÑADOR GRUÑÓN
Aurora Sinclair está a punto de cumplir su sueño de toda la vida de ser panadera.
Solo hay un problema.
La antigua panadería que heredó de su tío Jim necesita reparaciones urgentes.
¿Cómo encaja Randall Woods en esta ecuación?
Él es el mejor (y más gruñón) hombre para el trabajo. El leñador del pequeño pueblo con un pasado turbulento sabe exactamente lo que Aurora necesita hacer para poner en funcionamiento la antigua panadería de su tío en poco tiempo. Si está dispuesto a ayudar, claro…
¡Y quién mejor para convencerlo que la nueva y más dulce residente de Love Springs!
Aurora prepara un plan para persuadir al gruñón leñador de que la ayude. Desafortunadamente, su receta para el éxito se tuerce cuando la pasión y el deseo por el musculoso leñador comienzan a hervir en su corazón como el relleno caliente de fresa para una de sus deliciosas tartas caseras.
¡Si tan solo hubiera una receta especial que pudiera llegar hasta el corazón más encerrado de incluso el leñador más gruñón!
2º BOMBERO gruñón
Violeta Clarke está lista para conquistar el mundo, una fresa a la vez, después de heredar la vieja granja de su abuelo.
Ese es el plan, al menos...
Pero cuando el bombero William Baxter se presenta para una inspección de seguridad rutinaria, le informa sin rodeos que su plan de conquista mundial con tema de frambuesas se cancela hasta que repara el cobertizo de almacenamiento de la granja de bayas.
Sí, entiende que es un desastre de incendio esperando que ocurra.
No, no tiene dinero para reparaciones, Will.
Así que cuando el rudo y apuesto bombero regresa, ofreciéndole su ayuda más gruñona para restaurar el cobertizo, bueno...
Ella no puede rechazarlo exactamente, ¿verdad? Además, quizás un poco de sol y fresas eliminarán su mal humor.
En ningún momento Violeta pretendió enamorarse del bombero gruñón y atractivo con un trágico pasado, pero cuanto más tiempo trabajan juntos, más descubre que hay mucho más en William de lo que pensaba al principio.
Ahora, si tan solo pudiera convencerlo de que es perfectamente seguro dejar que las chispas de la pasión enciendan algo en su endurecido y cerrado corazón...
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