Los escándalos rara vez ocurren en el centro del salón de baile, pero en los márgenes todo es posible.
Desde el momento en que George Sweet le robó a su prometida, Roman Crawford ha buscado todas las formas posibles de vengarse del desagradable patán. Aunque tiene sus límites. Corromper a la hermana de Sweet, un verdadero paradigma de bondad virginal, está fuera de toda consideración; sin embargo, eso es exactamente lo que la propia dama solicita.
Si la humillación pública es la única manera en que Amity puede escapar de un matrimonio arreglado con uno de los secuaces de su cruel hermano, entonces será en sus propios términos. Ella solicita la ayuda del mayor enemigo de su hermano, quien está segura de que estará feliz de ver a su hermano humillado por su corrupción. Pero Amity no es tonta. El corazón de Roman nunca podrá ser suyo.
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Nacida mujer, pero viviendo toda su vida como hombre, Dane Winston se ha encontrado trabajando para lord Stratford, el hermano menor del duque de Ravenswood. Como su ayuda de cámara, apenas puede mantener al parlanchín lord en horario… ni puede mantener las manos de este lejos de su persona, una vez que descubre su verdadero género. Lo único más sorprendente que su atención es cuánto Winston la disfruta. Pero su aventura debe ser efímera. Mientras se desenvuelve en una fiesta en la mansión donde ciertos invitados están ansiosos por causar problemas al duque, descubre problemas propios en forma de sirvientes celosos... y alguien de su pasado con quien esperaba no volver a encontrarse jamás.Lord Stratford Sweet ha regresado a casa para descubrir que su difunto padre ha dejado el ducado en una terrible situación financiera. Mientras se esfuerza por ayudar a su hermano mayor, el nuevo duque, a ocultar el alcance de su insolvencia a una casa llena de invitados, ciertamente no necesita más distracciones. Pero encuentra una en la forma de su nuevo ayuda de cámara, un hombre que parece demasiado joven, demasiado suave... demasiado atractivo en un par de pantalones. Cuando Stratford descubre su secreto, mantener a Win en su empleo podría causar un escándalo que la finca difícilmente puede permitirse. Pero cuanto más conoce a Win, y la inusual conexión que comparten, puede que sea un escándalo que esté dispuesto a soportar... para siempre.
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Tercer hijo. El repuesto del repuesto. Eso es todo lo que concierne a Jasper Sweet, desdeñado por su difunto padre y pasado por alto por sus hermanos mayores. Todo y todos los que alguna vez le importaron inevitablemente terminan en manos de otro. Hay poco sentido en exponer su corazón, así que un libertino es todo lo que será. Uno descontento, por el momento, obligado a poner las dificultades financieras de su familia antes que las suyas y soportar un verano en su finca campestre sin más compañía que los hijos pequeños de su hermano.
Y la institutriz de los niños. Una solterona estirada y argumentativa que lo ha exasperado a cada paso desde el momento en que entró al servicio de su hermano. Una sirvienta que apenas merece su atención. Hasta que descubre que Sophie Radcliffe no es en absoluto lo que parece.
Acercarse a la mujer no es prudente, pero cuando ella se digna a ayudarlo con un escandaloso plan para rellenar sus arcas, apenas puede resistirse. Y de hecho, no lo hace. En Sophie, ha encontrado a una mujer de mente similar, ambición similar... pasión similar.
A medida que el verano en la finca Ravenswood avanza, y Sophie y Jasper se acercan cada vez más, el antes impenitente libertino comienza a vislumbrar un futuro para sí mismo que nunca antes había considerado. Pero debería haberlo sabido mejor.
Porque una vez más, lo que una vez fue brevemente suyo, pronto es codiciado por otro.
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Tras casi dos años de ausencia, Lady Laura Sweet ha regresado al Palacio de Ravenswood, hogar de su marido distanciado. El lugar donde sufrió su negligencia, así como el abuso emocional y físico a manos del difunto padre de este, el duque. Laura ha vuelto únicamente para exigir el divorcio a su marido, pero el hermano de este, el nuevo Duque de Ravenswood, está decidido a complicar las cosas y exige que discutan los fracasos de su matrimonio en su presencia.
Nash Sweet pasó años bajo el yugo de su cruel y malvado padre. Incluso tras su muerte, el hombre está resultando difícil de ignorar, y Nash apenas ahora está descubriendo todas las formas en que el viejo duque interfirió en sus asuntos matrimoniales. Pero eso no significa que perdone a su esposa por abandonar a sus hijos y renunciar a su matrimonio, ¡especialmente cuando regresa con una hija pequeña de la que él no sabía nada! Nash está igualmente dispuesto a hablar sobre el divorcio, pero con la proximidad resurgen viejos sentimientos... y quizás algunos nuevos para los que no estaba preparado.