Sinopsis:
El multimillonario gruñón me acusa de robar, hace que me despidan y ahora me quiere como esposa temporal... Creo que ha perdido la cabeza.
Easton Calloway necesita una esposa pronto, y me elige a mí para ocupar temporalmente el puesto. Aunque quiero mandarlo a la mierda, no puedo alejarme de la tentación. Así que hago lo que haría cualquier actriz arruinada que viviera en Nueva York y acepto las condiciones.
Debería ser fácil: un año de matrimonio, un cómodo ático y una asignación para gastos. Al cabo de 365 días, recibiré los papeles del divorcio y un cheque millonario. Lo único que tengo que hacer es fingir que estamos felizmente casados sin enamorarme.
Factible, ¿verdad?
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Después de que el encantador multimillonario y yo actuamos con éxito de casamenteros, me pide que sea su falsa prometida. Decir que sí podría ser el mayor error de mi vida, pero ¿para qué están los amigos?
Weston Calloway es el último hombre que imaginaba conocer después de una de mis aburridas rupturas. Pero ahí estaba él, en un bar de mala muerte, bebiendo whisky barato, con pinta de ser mi próximo error favorito. En lugar de liarla, nos convertimos en amigos secretos.
Cuando su celosa ex crea un drama innecesario, Weston me pide que sea su novia falsa. Las cosas se intensifican rápidamente y perdemos el control de la situación. Ahora somos compañeros de piso y llevo un anillo de diamantes que él me puso en el dedo.
Este juego puede ser divertido, pero acordamos una regla inquebrantable: no enamorarnos.
Fácil, ¿verdad? Debería serlo.
Mil gracias a SB!
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Cuando mi peor enemigo se alía con mi ex para destruir mi empresa de moda, me preparo para la guerra...
Asher Banks, con sus ojos color miel y su actitud arrogante, ha estado en lo más alto de mi lista negra desde la universidad. Nada ha cambiado en trece años. Le llaman «la parca de los negocios» porque su empresa de marketing ha llevado a la quiebra a varias corporaciones sin apenas esfuerzo. Y por culpa de mi celoso ex, ahora estoy en el punto de mira de Banks.
Es una situación muy peligrosa.
Como Banks es el mejor amigo de mis hermanos mayores, me concede un favor y se ofrece a trabajar con mi marca. ¿El truco? Quiere que me arrodille y le suplique su ayuda, algo que no puedo ni voy a hacer.
Ahora tendré que afrontar las consecuencias.
Vencer a Banks y a mi ex infiel es mi máxima prioridad, o tendré que encontrar un marido sustituto para poder reclamar mi herencia. Ambas opciones parecen imposibles, pero esta princesa está decidida a salvarse.
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Ser guardaespaldas de mis primos multimillonarios tiene muchas ventajas. Una de mis favoritas es rescatar a damiselas hermosas y atrevidas en apuros...
Hay algunos problemas con eso: Harper Alexander no es una damisela ni está en apuros. Ah, y no puedo olvidar mencionar que no quiere que la rescaten.
Lástima que no tenga opción.
Ahora mismo, me importa un bledo que haya escapado de la ciudad con su flamante prometido y que planee casarse con él la semana que viene... La encontraré. Quizás tenga que cargarla sobre mis hombros, pataleando y gritando, pero viene conmigo. No tiene ni idea del peligro que corre.
Por desgracia para ella, soy el único que puede salvarla. Pero tengo el presentimiento de que podría ser ella quien me salve a mí.
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